jueves, 23 de noviembre de 2017

¡CUIDADO, MUNDO...!

         La mujer de la  que estoy perdidamente enamorada cumple hoy 14 años. Por este amor podrían acusarme, ciertamente, de asaltacunas, que la suya la abordé mil veces para besarla, acariciarla y achucharla, con y sin su consentimiento. 

          Lo de mujer son palabras grandes todavía, que aunque su cuerpo, sus andares y su comportamiento sugieran que lo es,  sigue y seguirá siendo mi niña. 

          Su vida, ahora, se me antoja una aventura diaria, a la que se enfrenta con dos ovarios, mucha sustancia gris y las armas que su padre y yo hemos intentado darle, y que empieza a manejar con destreza. ¡Cuidado, mundo, que viene Lucía...!

          Si es bonita por fuera, que lo es, y no porque lo diga yo, más bonita es por dentro, por eso no hay quien, conociéndola, pueda evitar quererla.

          Hoy vamos a celebrar su vida de forma oficial, aunque su padre, su hermano y yo, la celebramos a diario, y presumimos del privilegio de tenerla cerca. 

          Me toca pensar cómo hacerle entender cuánto la queremos, porque sabe que es mucho, pero no alcanza a comprender la dimensión del infinito.

          Feliz cumpleaños, mi  niña. 

lunes, 13 de noviembre de 2017

BESOS A TU RECUERDO

         

   El tiempo no nos cura de tu ausencia, pero cicatrizan de a poquito los desgarros que nos dejó en el alma.

              No puedo evitar el absurdo de escribirte en cada cumpleaños que no cumples, porque tu pérdida fue lo que me dio de bruces contra la canallada que supone que la vida se acabe con la muerte.


              Hoy hubieran sido 39, pero se quedaron en 33, y te sigo echando de menos. Las cosas por aquí han cambiado, y pasamos por  momentos difíciles. Seguro que contigo cerca habrían sido menos espinosos. 

              Sigo mandándole besos a tu recuerdo, Pandora...