miércoles, 31 de octubre de 2012

MI PRÍNCIPE

              Hace cinco años, alcancé mi peso récord. Pesaba 68 kgs., que en mi altura, es mucho.


              Fui al hospital, a la revisión que tenía prevista, y en el mismo día, perdí seis kilos. Y me llevé a casa un muñequito que en menos de tres meses me hizo recuperar la línea. Se encargó de que no descansara...

             Se llama Daniel, y hoy cumple cinco años.

             Su parto fue terrorífico, digno de la fecha. Dejó patente su impaciencia desde el minuto uno, y salió sin esperar a que hiciera efecto la epidural, y de milagro me dejó llegar al paritorio. Pero cuando sentí su cuerpecito sobre mi pecho, me dio igual el resto del mundo, y desde entonces es el Príncipe de mi casa y de mi corazón.

             No es porque sea mio (ja, ja...) pero es un niño genial. Un rubito de cara pequeñita y ojos grandes, con una timidez injusta, que solo abandona en la intimidad, para mostrarnos un sentido del humor espontáneo y ocurrente, difícil de creer para quien no lo disfruta. 
   
           Cariñoso hasta resultar empalagoso, como a mi medida. Se despierta dando besos y te abraza porque sí. Enloquece a las abuelas, adora a su hermana y a su padre, al que pretende dar celos conmigo. Me besa cien veces al día, me piropea y me persigue...y, claro...me tiene loca.

           Adivino por cómo aprende, que heredó la inteligencia y el tesón de su padre (por fuera es todo yo, pero afortunadamente, por dentro se llevó los mejores genes), y que, a poco que sepamos conducirlo por el camino adecuado, sabrá ganarse el pan. 

           Y parece buena gente. 

          Sería genial leer ésto dentro de treinta años, y comprobar que tengo razón. Su hermana y él, son mi esperanza y mi empeño. La obra maestra de su padre y mía, dos personitas que dan sentido a que, entre miles de millones de personas en el mundo, nos encontrásemos antes que a nadie más. (Cielo, haces unos niños maravillosos...)



           Feliz cumpleaños, mi Príncipe. Sigue llenando mi vida de  besos hasta que llegue tu princesa.

lunes, 29 de octubre de 2012

ME PIDO MARMOTA...

                  La vida puede mostrarse realmente cruel. Sin ir mas lejos, todos los años nos castiga con un invierno, que para mí empieza cuando las mínimas bajan de 16 grados. O sea, ayer.

                 Los que me quieren poco,  estarán de acuerdo en que soy un poco víbora, o lagartona, como prefieran..., pero de sangre fría (no te rías, que he dicho "los que me quieren poco") conclusión a la que llego tras 41 inviernos sufridos en mis carnes. 

                Cuando la temperatura baja, mi metabolismo también, y tiendo a la menor actividad posible, a poder ser  engurruñada en mi guarida. Mis manos, mis pies y la punta de mi nariz, parecen pasar a un estado de precongelación continuo. Me vuelvo girasol, buscando el calorcito del astro rey, por doquiera que asome.

               Menos mal que  habito en una región privilegiada, donde los días grises rara vez forman grupos de más de tres. De hecho, aunque no creo en el cielo, doy fe de que el infierno existe. Está en la tierra, en ambos polos. Y el purgatorio más cercano a nosotros es la franja entre el Ártico y Despeñaperros. Soy la única mujer que dudaría en apuntarse a un crucero por  los Fiordos...Lo único bueno del invierno es el final.

               Los días invernales son duros desde por la mañana. El despertador suena, y el hecho de sacar la mano de  la manta para apagarlo, ya te despierta de mala idea. Te haces el remolón, no porque tengas sueño, sino porque ya no vives con tu madre,  que te  conectaba el calentador en el baño para que estuviera calentito y pudieras desnudarte sin parecer una gallina mamífera en celo, con todo de punta. Y lo que tarda en llegar el agua caliente....(aprovecho para recomendar encarecidamente la grifería termostática. Es a la ducha convencional, lo que la inyección letal a la silla eléctrica....tienes que pasarlo, pero sufres menos tiempo. )

                El resto del día es una sucesión de incómodos inconvenientes, como las tostadas frías, las capas de ropa, el hielo en el cristal del coche, los catarros, la ropa que lavas y no se seca, los colores grises (el color más descolorido que existe...), el agüilla en la nariz, los que odian Halloween, los que odian la Navidad, los que odian la calefacción...El que insiste en ponerte la mano en la cara, por si no sabes que la tiene fría...Los días tan cortos que no te da tiempo a nada.  Esa vuelta a la cama con las sábanas heladas...que cuando entras en calor, el otro ya se ha dormido...

              Para la próxima vida, me pido osa o marmota. Lo de hawaiana lo veo difícil...

              
        

sábado, 27 de octubre de 2012

MI DOMADORA DE DELFINES

           Hoy cumple 3 años una personita especial. Mi sobrina pequeña, que deja de ser bebé para ser niña. 

           La bautizaron Irene, "la que trae la paz". Y claro, es  un terremoto.

           Escogió para venir al mundo el mismo día de su padre, 39 años después. Se regaló al primer hombre de su vida, y él sigue coladito...

          Es una de esas niñas de anuncio, una rubita rechoncha, con unos ojos como soles. Bonita, un clon de su madre. Lástima que no heredó su carácter...

          Camina con todo el cuerpo, y seguir el compás de su barriguita y  su trasero al paso, es un espectáculo de los de babear.

          Come como sueñan las abuelas: mucho y de todo. Habla desde que nació, con una vocecita cantarina e hipnotizante. Cuando llora, aprovecha el tono de su alarido para domar delfines, y a veces, crea interferencias...Pero cuando se ríe, son cascabeles los que contagian su alegría.

          Apunta maneras. Es inteligente, pero además es lista, con un carácter para comerse el mundo. Y ya controla las armas femeninas en su beneficio. Tiene loco a su padre, a sus abuelos, a sus tíos y hasta su hermano. Que se prepare el universo.

         Por su venitas corre sangre cazallera, extremeña y sevillanísima. Se embelesa con marchas cofrades, por rama paterna y se va a hartar de campo por rama materna.

         Si hereda la mitad de la voluntad de su padre y los brazos siempre abiertos de su madre, va a ser digna de conocer.

         Yo sé que me quiere...ella disimula, me niega los besos y se escapa al verme...pero me quiere...que ya me han chivado que pregunta por mí.  

         Vamos a celebrarle el día. Tres años disfrutando de ver crecer a  esta personita, merecen homenaje. Ya me daréis la razón, cuando la vayáis conociendo.

          Feliz cumpleaños, muñeca!!

         

viernes, 26 de octubre de 2012

¡CON DOS OVARIOS!

      ¡Con dos ovarios!



      La foto puede parecer una provocación anecdótica, pero tiene su enjundia.

       El contexto es una manifestación en contra de matrimonio  homosexual en Marsella.  Las dos chicas que se besan, no son lesbianas, sino heterosexuales indignadas por la pretensión de limitar los derechos de las personas en función de su orientación sexual. 

               Me habría gustado tener la oportunidad y los ovarios de actuar como ellas. Y tengo en mente al menos cinco amigas como posibles cómplices, la mayoría casadas y madres, pero sin pretensiones de censura sobre la vida de los demás. Yo es que me rodeo de gente básicamente buena.

              ¿A qué jugamos? No hay bastantes límites y dificultades en la vida para dejarnos ser felices, que tenemos que meternos en las decisiones de los demás?  Si me enamoro de alguien, y quiero tenerle en mi vida, en lo bueno y en lo malo, para cuidarle y quererle, y esa persona me corresponde, ¿que más da que se llame Daniel o Lucía?

            Afortunadamente, los cuerpos humanos no ocultan trampas para manos o labios de según que sexo. No somos imanes que repelen al polo del mismo signo. Así que, si nos complace la compañía de alguien, ¿por qué no vamos a regalarle caricias, besos, y el cuerpo entero, aunque sea casi igual que el nuestro? ¿Por qué elegir para compartir la vida alguien del sexo contrario, si  ó si?

           No creo eso de que todos seamos bisexuales, ni que la homosexualidad esté genéticamente definida. La sexualidad es una faceta tan complicada como los propios humanos, mezcla de instintos, pulsiones, educación y experiencia. 

            Vengo siendo, hasta ahora, heterosexual. Y encantada, oiga...Pero cuando la madurez te abre la boca y el cerebro,  para dejar de avergonzarte de compartir sentimientos y pensamientos con tus íntimos, resulta que pocos de los que se atreven a tocar el tema, no admiten haber tenido  dudas acerca de su orientación. (De paso, decir que lo de orientación sexual no me gusta: implica que se pueda estar desorientado...).

             Yo también he tenido dudas.  Las hormonas adolescentes del infierno son desconcertantes, y el cuerpo femenino, hay que admitirlo, es precioso. En algunos de mis sueños digno de novela erótica,  no había ni un solo pene...(perdón, he dicho pene). Y sin embargo, despierta....pues no encontré a la chica adecuada, supongo. 

             El caso es que pienso que entre dos personas adultas que deciden libremente compartirse, no debe meterse nadie. Sea cual sea su edad, raza, sexo, color de ojos, marca de smartphone, y tamaño del pie. Por mencionar características sin importancia para los sentimientos.

            Solo espero que a mis hijos, cuando les toque, este tema de la discriminación por sexo les parezca antiguo,  anacrónico y hasta ridículo.

           Amén.



jueves, 25 de octubre de 2012

PENSADO SIN TRASPLANTE DE CEREBRO.

             Personalmente, no me llevo bien con  Monseñor Amigo Vallejo, desde la tarde aquella en que me abofeteó la cara en la Iglesia de mi barrio. Gesto que no cuadra mucho con la supuesta voluntariedad de confirmarte católica...(que si, que es un gesto ritual significando la imposición de manos de Cristo, si en la catequesis sacaba sobresalientes...es por chinchar...)

             Puesto que luego, con edad razonable para decidir opción religiosa, me desconfirmé (oficialmente es casi imposible, soy desconfirmada de hecho), parece lógico que discrepemos en multitud de opiniones, pero tengo que reconocer que, si estuviera de acuerdo con él, daría gusto  escucharlo. Luce una erudición y una forma de expresarse loables. 

             Todo esto viene a cuento porque esta mañana le escuché en una entrevista, y una de sus respuestas me ha tranquilizado mucho. Resulta que el alma es intransferible (lo ha dicho él, no yo, y él sabe...)así que puedo donar mis órganos (dentro de al menos 50 años, espero), sin miedo a que mis pecados y mis pulsiones censurables contaminen almas, en potencia celestiales.  Por no hablar de que yo necesitara un trasplante, y me transfirieran el alma de un deportista, un mojigato, o un votante del PP, en cuyos casos, el riesgo de rechazo es del 100%....

             Ironías malvadas aparte, y,  defendiendo de antemano que una periodista con la formación y experiencia que Mariló Montero atesora, exponga sus ideas y dudas existenciales en público, no me explico su reflexión televisiva del otro día. 

           Al margen de sus creencias y sus conocimientos científicos, no se puede poner en tela de juicio la validez de un órgano a trasplantar, por la catadura moral del donante. Hay muchos enfermos  esperando uno, a los que se les puede violentar sin necesidad. 

            Por suerte, tenemos el mejor sistema de  Trasplantes del mundo, y funciona extremando la confidencialidad de los datos de donante y receptor, con lo cual, el conflicto moral, difícilmente se daría. Y como explicó su director, la validez de un órgano no viene dada por la conducta del donante. Por cierto, ya que somos primeros en algo, serlo en este aspecto es para sentirse orgulloso, y no le damos tanto bombo como a La Roja...

            Puedo asegurar y aseguro, que si mi vida depende de aceptar un corazón, me dará igual de quien venga (preferentemente humano, eso si...), incluso siendo de Rajoy o de Fidel Castro. (Ea, ya me los he cargao, de paso...). 

            Y personalmente, me parece frívola y  prematura la  afirmación de Mariló, de que no querría que se le trasplantara un órgano de un supuesto asesino. La vida es demasiado preciada, y si la generosidad de un donante y el gran trabajo de tantos profesionales de la Medicina, te ofrecen  la oportunidad de prolongarla, los melindres morales están sobrando.

            Pienso yo, sin trasplante de cerebro....

martes, 23 de octubre de 2012

PAULA VAZQUEZ...¿O EL DEMONIO DE TASMANIA?

             ¿Qué le ha pasado a Paula Vázquez?!! ¿Por qué se ha liado?!!

             ¿Nadie le ha sugerido que anule su cuenta de Twiter  o su linea de teléfono? Sé que es un coñazo, con perdón, pero no haber sido tan torpe....

             Alma de cántaro!...si el estrés o el despiste te hacen publicar  tus datos personales, incluido tu teléfono, y eres anónima, o fea, o te dedicas a la taxidermia, no pasa nada. 

             Pero un pibón (desmejoraílla, según me comenta mi envidia cochina...) que vive de los medios de comunicación, y se debe a su público (como las artistas güenas), lo menos que puede esperar es una avalancha de seres indiscretos, que se mofan de tu torpeza.  Aunque, sinceramente, creo que la mayoría han sido  gente estupenda, a la que le caes bien, intentando reírse contigo, no de ti...porque te suponían buen humor. Tontorrona.

             Pero  tú,  en vez de reírte con ellos, soltando una de esas carcajadas que te hicieron estar donde estás, y anular las cuentas.... vas y te cabreas (porque eso no es enfadarse, es cabrearse...) y los amenazas,  los insultas, y entras al trapo de los necios. Es como si la Barbie Presentadora se hubiera transformado en Cruella de Ville, o en la madre de Rapunzel...Que palo...


            Para culminar tu obra, vas y publicas  los números de teléfono de quienes te llamaron, con datos identificativos. Apenas hayas visto un par de capítulos de C.S.I., de Ally McBeal o Boston Legal, básicos para el conocimiento de las leyes, sabrás que publicar esos datos en la red sin consentimiento, es un marrón sancionable. Es el doble tirabuzón con salto mortal de las meteduras de pata, cuyas consecuencias  vas a padecer como alguno te denuncie. Se te van a caer las extensiones, monina. Con el multazo, no te va a quedar ni para rimmel de los chinos. Y tú estás acostumbrada a la máscara de pestañas...

           Te veo en la Isla esa donde adelgazabas, pero concursando, para pagar multas. Y los polis en la cárcel lo pasan mal...(lo digo por las cosillas que les hacíais a los concursantes...).

           Tienes que fijarte en otras celebrities que han metido la pata, y han reaccionado con algo más de dignidad. Scarlett Johanson, Winona Ryder, La Pantoja,  Remedios Cervantes ...Sale más rentable y te da menos dolores de cabeza.

           En fin, guapa, que un mal día lo tiene cualquiera, y a ti se te ha juntado en uno, lo malo de tres meses. Tómate una tila, busca un amigo que te temple los nervios, y rectifica, que es de sabios y tú no pareces tonta. Y pásate al facebook, que es más guay.

SOBRAN PLAÑIDERAS

                Corren ríos de tinta, se comenta por las esquinas, se lamentan las comadres y no hacen falta plañideras, porque hay llantos de sobra.

               Un desalmado, en nombre su malentendido amor, ha matado a una niña de trece años.

               Cuando suceden estas tragedias, nadie parece entender, buscamos excusas que justifiquen lo injustificable, y solemos concluir que la locura apretó el gatillo.

              Es cierto que a esta niña la mató, por mano del miserable, una enfermedad. Pero no mental, sino social.

               Algo mina la salud de esta sociedad, cuando en una pedanía, donde se conocen todos, se permite llegar a una situación tan explosiva como la que había. "Entre todos la mataron y ella sola se murió...", decía mi abuela en estos casos, en los que no se  asumen culpas.

               No conozco los detalles, ni las gentes, y no pretendo juzgarles. Líbreme mi escasa inteligencia. Pero hay demasiadas peculiaridades, demasiadas sinrazones  en esta historia, como para que nadie pusiera pies en pared, y la zanjara.

               Entiendo que hay personas  cuyo desarrollo mental, intelectual, familiar, etc, no son los adecuados, y les provoca desequilibrios en sus valores, sus limites, dificultan su discernimiento en cuanto al bien y el mal. Entiendo que hay situaciones en las que un hombre de 39 años se obsesione de una niña de 11, incluso que ambos lo confundan con amor, uno por distorsión de criterio, y la otra por falta del mismo.

              Pero no me explico que la situación se prolongue durante dos años.

             Cierto es que la niña, instintivamente, había decidido terminar aquello. Pero una niña no sabe manejar estas situaciones. Si mujeres maduras se ven incapaces de abandonar relaciones  viciadas, degradantes, y siguen siendo manipuladas y maltratadas sin saber escapar, ¿como lo hace una cría?

            ¿Quien enseña a su familia a aleccionarla sobre su error, a plantar cara al embaucador?

            ¿Cómo es posible, que tras múltiples insultos y amenazas de muerte, a la niña y a sus allegados, con sus correspondientes denuncias, y siendo conocido el sujeto  por sus "rarezas", y modos conflictivos, las autoridades locales no pusieran coto, y se le permitiera conservar más de diez armas de fuego en su casa?

             ¿Dejamos un martillo en manos de un niño, que amenaza con romper la vajilla, sólo porque nunca lo ha hecho?

              ¿Tan disfuncional es el entorno de él, que no apoya al de la niña? Yo tengo un hermano de 35, y me resultaría muy difícil entender que llegara a casa con una pareja de menos de ventialgo...

              ¿Hay forma de comprender que un menor a los 13 años, pueda, legalmente, dar su consentimiento para tener relaciones sexuales con un adulto? ¿Entonces, por qué necesita la autorización de los padres para ir de excursión con el colegio? ¿Por qué le visita el Pediatra? Que yo sepa, para dar consentimiento de algo, hay que tener conocimiento.

               Yo me sumo a los culpables, a los que no hacemos nada por cambiar las cosas y nos lamentamos cuando todo pasó. Mi miedo es igual al de todos los padres, cuyos hijos están expuestos a desquiciados, amparados por normas obsoletas.

                Pero este rinconcito me proporciona mi derecho al pataleo, y necesitaba contarlo, como forma simbólica de abrazo a la familia de Almudena. Otra muesca más en la culata de las muertes absurdas.

lunes, 22 de octubre de 2012

TE ESPERO EN EL ANDÉN.

            Hay veces en que, inexplicablemente, te pierdes. 

            Todo parece en su lugar, en calma, encauzado y caminando por su pie, pero algo falla. Algo te distrae del camino, te dejas llevar, y de repente, no sabes dónde estás, ni por qué, ni a dónde vas.

           Te descubres en una especie de lapsus de adolescencia, del que no sabes salir.

           Los eruditos, a estos momentos, les llaman crisis personales. A mí me parece que son, más bien, apeaderos de la vida. Estaciones de este tren, que se empeña en ir tan deprisa. 

          A  veces tú decides bajar, para estirar las piernas, respirar aire fresco y replantearte la ruta. Otras te obligan a apearte, porque se acaba el camino, o alguien cortó las vías, en cuyo caso, el cambio de itinerario es forzoso. Y penoso. Y cuesta, porque normalmente, te separa de algún compañero de viaje.

           Lo importante de estas paradas, es no quedarse en ellas. No abandonarse en la vía muerta. Tienes que decidir tomar el tren siguiente, o el que va en dirección contraria, incluso esperar a que pase otro que te inspire más. Pero quedarse en la estación es  desperdiciar  los años, los afectos y las oportunidades. Es dejar de vivir.

           También hay personas obcecadas, que se resisten a parar, que se empeñan en seguir en el vagón, en cualquier condición y circunstancia. Y enloquecen de aburrimiento, o de claustrofobia,  de desilusión por un viaje cansino, sin sorpresas.

           Yo hago paradas. Me gustan. Casi siempre en otoño, para coger fuerzas antes de llegar al  odioso invierno. Suelo preguntar a los lugareños por las costumbres, las cosas buenas y malas del lugar. Me llevo un recuerdo, o hago algunas fotos, antes de volver al camino con más ganas. 

          Casi siempre me encuentro contigo. Confieso que te busco, como tú a mí. Coincidimos en el vagón o en los pasillos. A veces te paras más que yo, y volvemos a vernos en la próxima, y otras me acompañas durante largos trayectos. 

          Lo mejor de viajar contigo, es que, yendo cerca, en la misma dirección, ninguno se siente obligado a llevar el mismo paso. Nos basta con compartir la brújula, no perdernos de vista, y tirar del otro cuando se cansa. O esperarlo pacientemente. Y cumplir el pacto de no llevar pijama cuando durmamos juntos.

          En la próxima, nos vamos a buscar un hotelito con encanto, que tenemos que discutir algunas curvas del trayecto. Vale?

          Te espero en el andén.

viernes, 19 de octubre de 2012

ELLOS TAMBIEN TIENEN TETAS

               Hoy se celebra el Día de la Lucha contra el Cáncer  de Mama, enfermedad maldita para mi familia.

               Cualquier iniciativa que promueva la prevención y la toma de conciencia acerca del diagnostico precoz, me parece plausible. Cierto es que algunas campañas son ñoñas y sensibleras, y otras lo invaden todo de rosa, pero no olvidemos que sirven. Que salvan vidas, porque, para detectarlo a tiempo, hay que pensar en él. Y tenemos muy poca memoria y demasiadas cosas en la cabeza.

               Una de estas iniciativas, me ha hecho reflexionar hoy. Se trata de una cadena de mensajes, consistente en unas claves que interpretar  y colocar en nuestro muro del facebook, a modo de secreto, que sólo entiende quien  está en la cadena. Hasta ahí, todo bien. Una forma simpática de recordarte el tema. 

              Lo que me llamó la atención, fue una coletilla, que excluía a los hombres de la cadena de mensajes.

               No lo entiendo, cuando la naturaleza no los excluye del riesgo. Y cuando son un aliado para nosotras en la detección. Les encantan nuestras mamas y cuidar de ellas.

               El caso es que me gustaría poner mi granito de arena desde aquí, señalando el error de suponer que el cáncer de mama es una enfermedad femenina. Señoras y señores, los hombres también tienen tetas.  

               Su riesgo de padecer cáncer de útero o de ovarios, es similar a nuestro problema con la próstata, pero del de mama, no se libran.

              Es cierto que su riesgo es inferior, menos del 1% del total de casos. Lógico, cuando para que ocurra debe haber tejido mamario susceptible de enfermar, y estrógenos, (es bastante más complicado, pero no viene al caso profundizar). Los hombres tienen poca cantidad de las dos cosas, razón que justifica la menor incidencia. Pero ese casi 1% tiene nombre y apellidos, y puede ser un hombre al que quieras. 


            Los factores de riesgo, clasificaciones y opciones de tratamiento son similares, con diferencias mínimas. Generalmente  se detecta sobre los 60-70 años, en hombres expuestos a radiación, con antecedentes familiares directos (madre, hermanas...), sobre todo si sus parientes tienen alterado el gen BRCA2. También aumenta el riesgo en enfermedades relacionadas con elevación de estrógenos, como la cirrosis y la obesidad, o en alteraciones genéticas como el Sd. de Klinefelter.
            
          El pronóstico y posibilidades de curación son iguales que en el femenino, si se detecta en el mismo estadio. Y ese es su talón de Aquiles. Generalmente se diagnostica tarde, y la única razón para este retraso, es que no lo sospechamos. Ni los pacientes, ni los médicos. Además, la menor proporción de tejido graso y conjuntivo de la mama del varón, facilita la diseminación hacia ganglios y torrente sanguíneo: metástasis.
             

         También quiero llamar la atención sobre las dificultades que un hombre tiene para encarar este problema. Es duro afrontar un cáncer. Pero cuando todo el sistema para combatirlo está enfocado y pensado para que lo usen mujeres, debe ser intimidante. Salvando las distancias, imaginemos que quieres hacer pis, y sólo hay urinarios de pared. O que te invitan a una copa y te llevan a un club de streptease (para hombres, se entiende).

          Tan asumida tenemos la feminidad de la enfermedad, que ni los profesionales tenemos la sensibilidad necesaria para afrontarlo.  En los pocos años que llevo ejerciendo, he conocido decenas de mujeres , pero sólo un  hombre con cáncer de mama. Tenia cuarenta y tantos, y recuerdo que, a toda su pesadilla, se añadía el estigma de ser único entre sus compañeras. Cuando acudía a sus sesiones de quimioterapia, controles, etc, tanto el personal como las pacientes pensaban, automáticamente, que era el acompañante de alguna de ellas. Se quejaba de las miradas que le escudriñaban, a ver dónde estaba su fallo, su motivo, su lado femenino donde alojar el cáncer. Tan banal como tener que compartir aseo con las mujeres durante las sesiones de radioterapia. Tan absurdo como que la farmacéutica le preguntaba por su mujer, cuando compraba la medicación. Tan equivocado como los diagnósticos previos a la sospecha del cáncer, cuando acudió a su médico diciendo que tenía un bulto.

          Obviamente, mi más entregado apoyo a todas las enfermas. Pero no quería dejar pasar la oportunidad de llamar la atención, hacer discriminación positiva  sobre los enfermOs de cáncer de mama. Si de paso  consigo que alguno de vosotros explore periódicamente sus mamas, con el mismo entusiasmo que las de vuestras chicas, igual conseguimos evitar un disgusto. 

          Tocaos, miraos, cuidaos. 

          En esta guerra, hay soldados y soldadas...








 



jueves, 18 de octubre de 2012

50 LUCES DE YERG.

         Se lo que estás pensando. 
        Yo también. 

        Cada vez que pasas cerca, hueles mi deseo.

        Si pudiera, te lloraría los besos, te suplicaría las caricias que me calmen la sed absurda con que me pagas. Cómo añoro tu aliento en mi ombligo.

        Cuanto más difícil se torna esta querencia mía, más se crece mi descaro. Varía su consistencia, desde etérea hasta arcillosa. A veces se escurre entre los dedos que consuelan tus ausencias, y  otras manchan mis reparos, dejando huella indeleble, quemando mis rincones.

        Tu sola imagen lubrifica mis sentidos, enardece mis planes, que casi nunca se cumplen. Mis melancolías huelen a ti.

        Y entonces, sueño. ¿O recuerdo?

        Imagino que no es mío, sino nuestro, el deseo. Que no me olvidas un poco cada día, que te cuesta dejar de pensarme desnuda, entreabiertos mis labios y mi cuerpo para recogerte dentro, cualquiera que sea el trozo de tu piel que me regales...Me muerdo los labios, recordando...¿Acaso pudiste olvidar cómo se retorcían mis piernas al antojo de tus manos en mis medios...? Yo no olvido tu sonrisa mientras me tocabas, como el pianista que domina la sinfonía. Que control de tus instrumentos...

        Tengo un plan, sabes? Mañana (o el mes que viene, o dentro de dos años, un siglo, tres milenios y dos reencarnaciones....) voy a tenerte a mano. 

        Voy a besarte sin  prisa, sin invadir. Saldremos a cenar, como ayer, o hace meses, o hace años, no recuerdo....Tú sabrás (yo me encargo) qué ropa interior llevo, pero no me la quitarás, a menos que lamas  cada centímetro que desnudes. Tendrás que hartarte de dulce de leche para que te arañe la espalda.

        Quiero provocarte. Quiero que sufras de deseo, como yo. Quiero ser prioridad para ti durante unos minutos. Que penetrarme, también con la mirada, sea vital para tu momento. Y una vez sitiada la plaza, tus entradas y salidas sean casi cansinas. Que me invadas durante horas, y  me duelan los adentros de tanto recibirte. 

         Cansarme de tu sexo, vaciar mis fuentes. Dejarme de tanta frase manida, ni eufemismo, que lo que quiero es hartarme de tus rincones y  salientes, oler a  ti, a tu saliva,  a tu sudor y tu cansancio. Quiero agujetas con sabor a  lascivia. O, mejor,  a deseo satisfecho, sonriente, como la primera segunda vez....

      Para esposarme a la cama no necesitarás más que una mirada. Si quieres vendar mis ojos, basta tu deseo, y no los abrirá ni el mas dulce de los orgasmos. Y el placer de tu fusta, ya lo conozco. Se me escapan los gemidos, y peco de palabra y pensamiento. Ummh... 

       Hazme una jaula con tus brazos. Fingiré que quiero escapar, buceando entre tus piernas. Tengo un catálogo de caricias esperándote en mi boca.

       No espero cumplirlo,  y sin embargo, ya ves lo simple de mi plan. Recurrir al truco viejo de la necesidad más antigua del mundo, a ver si, entre sábanas, consigo quedarme un trocito de tu alma. 

        Quiero escribir lo nuestro, necesito contar la necesidad que me has creado de ti, que los demás sepan cómo nos amamos. Da igual que nos juzguen.

        Ser siempre tu de vez en cuando, para que cada minuto me sepas tuya.

        Y saciar estas ganas que me comen por dentro.

        Darte mis cien luces, porque yo no tengo cincuenta sombras...

lunes, 15 de octubre de 2012

HAZAÑA?

             Afortunadamente, a lo largo de la Historia, han existido  hombres y mujeres osados, más que valientes, inquietos, capaces de mirar más allá de su realidad contemporánea, y carentes de la prudencia que nos proporciona el miedo a lo desconocido. 

             Esos hombres y mujeres han constituido eslabones de nuestra conquista sobre la naturaleza, que infinidad de veces, han supuesto pasos importantes en el conocimiento de nuestro mundo.

           Me refiero a gente como Colón, Marco Polo, Livinstong, Amundsen, Armstrong, Amelia Earthart, y Amy Jonhson. Conquistadores de metas hasta entonces intangibles. Locos con suerte. Ateos de límites. Descreídos de cotos. Azotes de las fronteras.

           La Humanidad no tiene más opción que agradecerles, honrando su memoria, que nos fueran completando los cartogramas, (salvo excepciones como los pueblos indígenas, posteriormente aniquilados en nombre del progreso...).

           Lo que no entiendo es lo de Baumgartner, ni a los que apoyan este tipo de locuras en pos de publicidad o notoriedad. La única explicación convincente para que un hombre de 43 años, lleve cinco preparándose física y mentalmente para dar un salto de cuarenta kilómetros, arriesgando su vida, su salud, su futuro, sería que su experiencia fuera la base para algún logro médico, físico o, de alguna forma, beneficioso para la ciencia, pero debo ser una ignorante, porque no imagino ninguno para este caso.


            La sensación de este hombre al salir de la cápsula antes de saltar se escapa a mi imaginación. Asomarse fuera de un vehículo y ver a tus pies un planeta, desde distancia suficiente como para contemplar sus límites, certificar que es una esfera, y saltar....debe ser muy parecido a creerte un dios. Estás haciendo algo que no ha hecho nadie mas que tú. Y sin embargo, si es creyente, debe haberse sentido una insignificante mosca en el infinito de las dimensiones contempladas desde allí.

            ¿Qué fuerza extraña, qué impulso es el motor que ha hecho saltar a este hombre, anulando de su cerebro todo freno a su intención?

           Si tiene miedos, planes futuros, amigos, familia....¿que fuerza extraña le hace olvidarlos, subyugar su importancia a la de su hazaña?
¿Merecía la pena correr el riesgo de un ictus, un traumatismo brutal o complicaciones médicas impredecibles, dada la cantidad de detalles que podían fallar? ¿Acaso no entiende lo preciada que es la vida? ¿O su concepto de vida implica descargas de adrenalina que aniquilarían al resto?


         Yo soy una enamorada de las montañas rusas, las alturas de vértigo y los aviones, pero jamás sería la primera pasajera de un nuevo modelo. Este hombre ha sido un pionero, ha sido el primero en probar la mayor atracción jamás imaginada. 

         Pero yo todavía no he decidido si es plausible para mí.

jueves, 11 de octubre de 2012

DOMINGO, 14-O.

              No es tiempo de chistes, ni de frivolidades, cuando andamos de vacas flacas, pero...dicen que hay que poner al mal tiempo buena cara, y algunos profesionales de lo absurdo, de la sátira y de la comedia, consiguen sacar punta de las bofetadas que da la vida, intentando arrancarnos alguna sonrisa.

            Sobre gustos no hay nada escrito, y menos en el humor. Blanco/negro, Morancos/Les Luthiers....

            Desde hace meses intento no irme a dormir disgustada. Me sienta mal y me quita las ganas...de dormir. Así que vengo cenando con  Bob Esponja, por imperativo de mi prole, y postreo con mi marido y Wyoming. Hoy, con Wyoming (un beso, cari...).

            En los últimos días, Wyoming ha hecho una propuesta, cuanto menos, original. Y me he apuntado.

            En respuesta a la valoración  de Rajoy, dando más importancia al número de ciudadanos que no va a las manifestaciones, que a los que van (y que contabilizan de forma extraña, no digan que no...), ha convocado una protesta contra los recortes y las medidas del gobierno para combatir la crisis. Tendrá lugar el domingo 14 de Octubre, a las siete de la mañana. En casa de cada uno. Es decir, se contabilizarán como personas que apoyan la protesta, los que se queden en casa. Quien no esté de acuerdo con la convocatoria, deberá salir  a la calle para no ser contabilizado.

           Para boicotear la protesta, se espera que la parte contraria(los malos...) adelante los horarios de misas, juras de bandera, bautizos, e incluso corridas de toros,  a las siete de la mañana. Los mítines del PP ese día, serán  maitines.

          Yo creo que es jugar sucio, pero allá ellos...

          Por mi parte, pienso secundar la protesta. No me esperéis en ninguna parte hasta, por lo menos, las 11. Que yo cuando protesto...Eso, si no me pongo radical y rodeamos el congreso, digo...la nevera. Que digan lo que digan, es legal.

          Os animo a protestar, a decir basta. El domingo a las siete, todos en casa (cada cual en la suya...). Juntos, podemos!!

martes, 9 de octubre de 2012

ZANGANEO MENTAL

               Hoy me resulta imposible concentrarme. Mi cabeza pulula de un interés a otro, cual abejorro en invernadero.

               Intento estudiar, pero la pantalla del ordenador me parece tan insulsa... encuentro excusas continuas...Me levanto a tomar café, para no dormirme, molesto a  mi niña, con dudas por los deberes. Me escapo de mi cabeza con  la música de fondo: mi enano, que acaba de descubrir el emocionante mundo de la cartilla de lectura. Tiene los ojos abiertos como platos, que parecen salirse de la cara cuando reconoce las silabas encadenadas y su significado. Si mantiene su entusiasmo y se engancha a la lectura, estará ganando una parte grande de su dicha. Bienaventurado el que disfruta leyendo, porque suyo será el saber.

             Lo intento de nuevo, y me  descubro haciendo una lista mental, en el pensamiento paralelo, de las cosas que necesitan mi atención urgente: regar las plantas, ordenar los calcetines por colores,etiquetar los tarros de legumbres...

            Pero todo este zanganeo mental tiene un punto recurrente. Tú. 

            Tú y tus manos, Tú y tu cuerpo, Tú y tu risa. Tu silencio, tu calma, tu negación. La mirada que todo lo dice, la que espero. 

            Tú y nuestros planes, nuestros recuerdos, nuestros besos. La ola que nos lleva, la playa que esperamos.

            Llevo todo el día pensándote, intentando que mis fantasías funcionen como un imán del destino, que te conduzca a mí. Como siempre, tus obligaciones te encadenan, privándome de tus susurros. Ni el teléfono parece hoy de nuestra parte...

            Otro café, a ver que pasa...

lunes, 8 de octubre de 2012

LECCIÓN DE FORTALEZA

           La mayoría de las personas que conoces te pueden dar una lección en algo. Por deleznables que parezcan, siempre esconden alguna moraleja, buena o mala. 

          Últimamente pienso mucho en una mujer, a la que los años  de trato y su cariño para conmigo, me han hecho querer sin reservas. 

          Es una mujer sencilla, llena de valores buenos y vacía de egoísmo. Pasó de niña, a novia del que  hoy es su marido, a los trece años. Cosas de los sesenta. Era una jovencita guapa(de ahí su hija y su nieta), virtuosa y discreta. La candidata ideal para esposa. Peluquera, aunque, por supuesto, lo abandonó para criar a su familia, que trabajaba el marido, como dios manda...Cosas de los setenta.

          Ha sido esposa intachable, más allá de lo exigible, y el reconocimiento a su dedicación nunca ha estado a la altura.

          Madre amorosa donde las haya, con fallos, como todas las madres. Aunque nosotras  copiemos sus errores después.

         Y abuela de pucheros, de  mesas llenas, de achuchones y de cientos de besos. De cantar nanas y acurrucar para dormir. Los niños se crían mejor con abuelas así.

         La conocí a  los 16 años, y jamás me regaló un mal gesto, ni un desagrado. Me acogió como una más de su camada, a pesar de que me llevé a su primogénito. Probablemente, adivinó que le daríamos  dos de sus mayores tesoros: la mitad de sus nietos. Y me consta que me culpa de muchas de las sonrisas de  su hijo.

        Su vida, como tantas, ha estado llena de luces y  sombras, y esa mezcla, la penumbra, no ha dejado que brillara la mujer inmensa que lleva dentro. 

        Sufre, desde hace años, la enfermedad en casa. Los detalles no importan. 
Y  hace meses, la muerte le arrebató su vida, pero sin matarla, que es peor. Le cortó de un tajo la mayor de sus arterias, la que le suministraba alegría, ilusión, paz. Su corazón mismo. Su niña.

        La lección más grande de las muchas que me ha dado, ha sido de fortaleza. Su frágil apariencia esconde una de las mujeres más fuertes que conozco. Un ser inquebrantable, pese al dolor continuo, físico y psíquico, que no se permitirá derrumbarse mientras su esposo enfermo la necesite. Un esposo al que no dejaría desamparado, aunque fuese el peor del mundo.

        Si alguien sabe donde los venden, me gustaría regalarle unos años de felicidad sencilla. De vida sin dolor, de disfrutar de sus nietos, de pasear sin carga, de soltar los lastres que tiran de su persona, que la hunden en el mar de su pena.

       Le doy las gracias por su cariño, por sus puertas abiertas, sin  meterse en las mías, y porque tiene la culpa de todo lo bueno que me da su hijo.


       Pocas personas pueden  decir ésto de su suegra. Yo tengo esa suerte.

sábado, 6 de octubre de 2012

LO QUE NO SE NOMBRA

            Hoy he leído en un artículo, acerca de otra injusticia social, que " lo que no se nombra, no existe".

            Gran aserto.

            Al igual que damos por cierto un rumor cuando se repite con vehemencia, pasamos por alto los temas de los que no se habla. Hipócritamente, dejamos de hablar de todo asunto molesto, desagradable...,maloliente para nuestro ánimo.

           Evitamos nombrar a las mujeres asesinadas por sus parejas,  a los dos días de enterrarlas. Incineramos su recuerdo, su injusticia, la desolación de su familia. Los damnificados en Haití ,  en cientos de catástrofes naturales, cuando  se acaba la campaña  benéfica de recaudación. Los niños sin ropa y sin juguetes, cuando pasa Navidad. Las injusticias sociales cuando pasan las elecciones...

           Pero esta verdad se hace mas dura en la intimidad. La usamos a diario para sobrevivir a las frustraciones, en lugar de afrontarlas. 

           No hablamos de los sueños inalcanzables, de los amores platónicos o prohibidos. De la fealdad de los niños, o la maldad del amigo. De los cambios de humor de nuestra pareja, cuando sospechamos su infidelidad, o, aún peor, su indiferencia. De la persona que veíamos en el espejo, que de repente, un día,  sustituyeron por esa otra que tiene canas, arrugas, flaccideces y artrosis, con cara de acelga los días húmedos.

           No hablamos de quien nos falta en Navidad, del padre prófugo en los cumpleaños, o de quien se fue para siempre, en las bodas. 

           Pretendemos anular su existencia, negar su ser, al no citarlos. Como  si fuera un sortilegio, un encanto macabro y peliculero, por el que al nombrar tres veces lo rechazado, se hiciera presente.

           Que tontos somos. Con qué argucia tan simple engañamos a nuestro propio cerebro. Los seres racionales. El buque insignia de la evolución...

           Pero será mejor no hablar de ello...

viernes, 5 de octubre de 2012

COMPRAR SUJETADORES

           O yo estoy tonta (que puede ser...) o cada vez es más complicado comprarse un sujetador.

           Cuando yo empecé a usarlos (con quince años, la última del grupo de amigas, un complejazo....) mi madre me acompañaba a la mercería del barrio, y yo sólo tenía que elegir el color, porque aquella señora("la Chari"), con un vistazo, sabía cual era tu talla. (Supongo que la mujer iba a por la más chica y punto, tampoco era para liarse....). Y para casa. 

           Nuestras ancestras, lo tenían  más fácil. Se los hacían a medida (mandarina, melocotón,  melón...), así que no había dudas. Me contaron que mi abuela, se los medía por la cabeza. (Tuvo 13 hijos y amamantó a cuanto niño pudo, incluso a una nieta. La posguerra, ya se sabe....)

           Pues eso ha cambiado. Tanto, que estoy temiendo que mi hija los use. Yo le puedo explicar cosas sencillas, como alisarse el pelo, arreglarse las uñas, usar maquillaje, tampax,  mascarillas, hombres...pero no voy a saber contarle como comprarse un sujetador. Vamos a necesitar una personal shaper (existe: es una señora que trabaja en las tiendas de lencería y te asesora sobre la talla y modelo que necesitas de cada prenda. Fijo que hay millones de curriculums de mozalbetes en los buzones de las tiendas).

           Pues resulta que necesito darle un repasito a mis sujetadores, y como he bajado un poco de peso, pensé revisar la talla, para que no queden sueltos. Y ahí empezó el problema. 

           Aprovechando unas compras, pasé por una tienda de lencería y empecé a mirar....como no estaba segura de la talla, cogí la mía de siempre, y una mas pequeña de un par de modelos. Pero claro, también hay tallas de copas, con lo que llevaba cuatro sujetadores de cada modelo... Una señorita muy amable se me acerca, y me  explica que el mismo modelo lo hay también con push up, o con relleno gradual, por si me interesaba. No entendí muy bien la necesidad de relleno que aquella chica encontraba en mi busto...(hace tiempo que dejé atrás mi problema de los 15 años...) pero me contuve, y educadamente, le dije que volvería otro día, que tenía prisa...

           La realidad es que pasaba de probarme 20 sujetadores para comprar uno, y quise informarme bien de cual era mi talla antes de volver a la tienda. 

           Y al buscar información...encontré el infierno. 

          Empecé por determinar mi talla: contorno del torso justo bajo el pecho +15 para el número, y para la letra, contorno a la altura de los pezones y restarle el número anterior, y según la cifra resultante, A, B, C ó D. Estas son las normales, pero hay desde AAA a KK...yo tampoco me la imagino...Y pueden variar según el país donde los compres...

          Pues después resulta que aparte de elegir el tejido, color, dibujo, tipo de tirante  (yo creía que sólo  había con, sin y de silicona...), lo hay con o sin relleno, pero el relleno puede ser ligero, gradual o supergradual, o push up, o soft cup. Pueden ser deportivos, de control de postura, padded, "day"....


         Y los fabricantes se rasgan sus vestiduras porque el 80% de las mujeres llevamos un sujetador de talla inadecuada...Inexplicable.!

         Así que voy a estudiar, que mañana quiero volver a la tienda y vacilar de que no necesito personal shaper.  Igual hasta rezo para que mi niña salga a mí, y me queden algunos años de margen para prepararme.





P.D: por favor, que nadie use la palabra sostén para referirse a tan complicada prenda...es una ofensa al buen gusto.

jueves, 4 de octubre de 2012

MI REFUGIO

          En los tiempos que corren, hay que tenerlos bien puestos para repartir sonrisas sin fingirlas. Hay que contar con una mezcla difícil: un medio de vida aceptable, ver el vaso medio lleno y personas cerca que te ilusionen. Y salud.

         Aún así, es complicado, porque nos movemos en un escenario en el que la felicidad, el optimismo y la diversión, son políticamente incorrectas. Porque miras alrededor, y te chirría el ánimo, propio y ajeno.

         Es como ser el tuerto en el mundo de los ciegos.

         Yo, generalmente, sonrío. Pero a veces me falta algún ingrediente de la mezcla. Y entonces te sientes pequeña, frágil y te asustas. Y el miedo engendra enfados y despropósitos, que se diluyen entre la multitud, sumida en sentimientos consonantes.

         En esos momentos, hay que refugiarse. Hay que tener un bunker, un escondite secreto, donde sentir que nada pasa, que nada importa, que todo es mentira.

        Tú eres mi  refugio, mi cobijo, mi pozo de serenidad. La voz que me despierta de los malos sueños, pintando la sonrisa delatora en mi cara, para comerme el mundo si hiciera falta.

        Espero que no te rompas, que no te hundas, ni te anegues. Que sigas siendo el sitio confortable donde confío volver.

        Cada vez que necesites  uno así, mis brazos están aquí. Voy calentando la lumbre por si tienes frío.





























miércoles, 3 de octubre de 2012

MIENTEME

         Ahora, miénteme....

         No voy a reclamarte verdades, ni sinceridad. Sólo  necesito mentiras. 

         Mentiras que me cuenten historias de tus  días descoloridos sin mí, de tus melancolías por mis besos.

         Engañame copiando poemas que cuenten lo que quiero oir, aunque no lo hayas  entendido nunca.

         Quiero que me embauques con canciones de celos, de amores prohibidos que rompen barreras, y de rincones donde nos quisimos tanto...

         Háblame de las veces que sueñas con mi cuerpo, con mis manos en el tuyo. Dime que intentas olvidar la danza de tu abdomen contra el mío, porque las ganas se desatan. Que no toleras el recuerdo de mis labios mordidos por el placer.

         Adelántame la fábula de tu plan  para seducirme, de las caricias nuevas que te has inventado para mí, porque son sólo de mi talla.

         Llega, si es necesario, al perjurio, para convencerme de tu cariño, de que estarás ahí siempre.

         Miénteme la vida entera, todos los días que nos queden, como si fuera tu penitencia. 

        Porque  mintiendo, al menos, me hablarás. Y lo único más cruel que tus mentiras,  es tu silencio.

lunes, 1 de octubre de 2012

ME VOY A COMPRAR UN PUEBLO

         Estoy planeando comprarme un pueblo. Bueno, yo sola no, en grupo...

         Hace unos días leí una noticia  en que explicaban que hay muchos pueblos en venta en España. La mayoría son grupos de casas viejas, muchas recuperables, con un cantidad variable de terreno municipal. Pueblos abandonados hace años, cuando los españolitos emigraban a la ciudad en busca de calidad de vida. 

         Los hay desde menos de 60.000 euros: una ganga, teniendo en cuenta el precio de la vivienda (aún ahora...)

         Es cuestión de buscar un grupo de amigos que quieran cambiar de vida y empezar desde cero, echándole valor, utopías a raudales y  ahorros. Esto último es lo mas complicado. Lo demás, lo tengo, incluso los amigos.

         Yo buscaría un pueblecito pequeño, de unas veinte casas. Invitaría a vivir en él a gente buena, conocidos por mí, o por los de mi confianza. Con o sin niños, pero que gusten de compartir, de tener vecinos.

          Necesitaríamos, al menos, un profesor, un médico, un enfermero, un ingeniero, un chapuzas, un cocinero, un peluquero, y un bombero....También un pensionista y una cotilla, para vigilar las obras y darle ambiente a las calles.
Policía no, que nos conocemos todos. Cura, tampoco, que no habrá iglesia, ni mezquita, ni sinagoga. Ni oficina de empleo.

          El alcalde sería un puesto rotatorio, como los presidentes de la comunidad, y todos los plenos serían  abiertos al público. No habrá partidos políticos, sino personas con ideas propias. Ninguna manifestación,  ni persona será ilegal. 
     
           La tesorera o concejala de cuentas sería un ama de casa (única titulación curricular que garantiza seriedad, recursos y equidad), y los impuestos se podrían pagar en horas de servicio comunitario. Y habría un banco que sería como una hucha gorda, y daría préstamos decentes y justos, aprobados por el pleno.

         Las casas se repartirían según número de conviventes y las arreglaríamos entre todos, como los amish. Y cada una tendría su huertecito ecológico.

         La conciliación familiar sería un hecho, porque habría hotel infantil.

         Todas las calles serían peatonales, y las casas tendrían paneles solares y trituradores de basura de serie. Y wifi comunitario.

         Los niños podrían jugar en la calle sin miedo. Y sabríamos el nombre de nuestros vecinos. Y los perros irían con pañal o dueño consecuente.

        Las fiestas  municipales no se harían en honor a ningún santo, ni se celebrarían maltratando  toros, ni ningún otro ser vivo. Ni tirando tomates. Esos para el gazpacho.

        Estarían prohibidas las motos que hagan el mínimo ruido, los sitios  sólo de hombres o sólo de mujeres, los horteras y la gente sin desodorante. Y los programas de tele 5 y los realitys. Y el rap y el hip-hop.

       El himno municipal sería alguna canción de Bon Jovi, ya la iré pensando...La bandera, blanca, y el escudo, la cara de un niño.

       Tendremos gimnasio, piscina, biblioteca y teatro gratuitos. Prohibidos los bingos, las salas de juego y los clubes de streptease. Y en la cafetería habrá tostadas de pan de pueblo, con café del bueno a un euro. Y zumo de naranja de las que se crían en árboles.

       Y una vez al mes, haríamos una paella como los de Villa Abajo, pero más rica y con más gambas.  Para celebrar la buena idea que tuvimos cuando  compramos el pueblo.
      
       Y al salir a la calle, no veré caras grises, ni rostros de acelga, malhumorados y distantes. Veré la sonrisa  M. , los ojos inquietos de A. , la charla mañanera de  R., el mal humor matutino de J. y los buenos días de F.

      Todos los niños tendrán buenos modales , porque aprenderán de sus mayores.

       Quien se anime, que se apunte. Voy buscando en los catálogos y pidiendo presupuesto...