jueves, 23 de febrero de 2012

SED BUENOS....

    Me empiezo a plantear el miedo.
 
    No hace falta que repita que el triunfo del PP fue para mi mala noticia. Soy demócrata convencida y ciudadana consciente de que el nivel de formación de una gran mayoría, en la que me incluyo, nos hace maleables a la influencia de la propaganda y la publicidad. Que cuando la vida se nos pone de espaldas, de la parte baja de la espalda, es difícil mantenerte fiel a los ideales, y votas a Caín si hace falta, con tal de que te asegure  que a tus hijos no les faltará el maná.
     La situación, pues, auguraba un giro a la derecha, porque cuando gobierna con política de derechas, la izquierda no convence, por mucho que lo justifiquen las circunstancias.
      Y vino. Menos mal que mi abuela no lo vió, se ahorró el disgusto.
      Lo que vengo a decir es que no me preocupaba mucho el cambio, porque la alternancia política es sana para la sociedad. Nos fastidiamos alternativa pero democráticamente. Como cuando Sevilla y Betis bajan a segunda, y nos chinchamos por turnos.
      Era obvio que cambiarían leyes importantes limitando libertades ( matrimonios homosexuales, aborto, educación, sanidad...), y que de una forma u otra cambiarían nuestro modo de vida. He llegado a pensar que unos añitos de yugo de derechas, abrirían los ojos de mucho obrero que no se entera de que legítimamente,  los diestros defienden el capital.
      Yo seguía tranquila en mi fastidio. Cuestion de adaptarse y aguantar."Resistiré" , como canta Wyoming.
       Pero desde hace días, la cosa pinta fea.
       Esperaba un gobierno discreto, que fuera ejecutando su programa secreto de a poquito, sorprendiendo con bocaditos a nuestro derechos. Pero no.
       Llevan a gala el despotismo y el descaro en su hacer, se les llenan las bocas de "porque lo digo yo y mi mayoría absoluta" , convirtiéndolas en fauces que ladran en lugar de hablar. Han dado la razón a los que anunciaban los doverman....
        No salgo de mi asombro ante cornadas como las sentencias del juez Garzón y de Camps, amparados por los nuevos tribunales, los impuestos que  les han impuesto imponer las circunstancias, que ellos no querían...los recortes que guillotinan a los mas débiles. Y por fin, su obra maestra, su tesoro: la reforma laboral. Un todo incluido para los empresarios que se permiten, ya no solo pensar, sino decir, que si un parado no acepta el puesto que le ofrezcan, aunque sea en Laponia, pierde sus derechos. Se cargan de un plumazo decenios de lucha sindical y de conquistas sociales. Igual piensan en el derecho de pernada...
        Asombro rozando la incredulidad ante policias que apalean como animales (los polis, no las víctimas) a estudiantes que reclaman sus derechos en España.¡En España en el 2012!!
     
        Señores, que los que se suponen servidores públicos (y conozco suficientes para condiderarlos así) reduzcan con saña a los "enemigos" manifestantes, no es imaginable en el país en que yo creía vivir.  Acaso vuelven los grises? Y ha sucedido. Y es intolerable.
       Pero lo que realmente me indigna y asusta es la autocomplacencia con que anuncian las sentencias que penarán miles de familias. Las leyes y las normas las cambiaremos con la alternancia que vendrá, pero el amargor de su conducta puede dejar huella.
      Señores mandamases: no hay necesidad de gobernar déspota, descarada y sibilinamente. Las cartas boca arriba y respetando las reglas, por favor. Que nos vais a empezar a caer mal, y no hay por qué. Un gobierno capaz de retirar de la programación el "Cuentame" roza el culturocidio. Miles de almas sin saber que hacer los jueves por la noche. Que vosotros creéis en la salvación  eterna, y os estais ganando el infierno...
      Por el bien de todos...sed buenos.

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