A veces necesitas pasar un tiempo sola, para descubrir pequeñeces sin importancia.
En apenas doce horas, yo he descubierto algunas.
Por lo visto, no eran tan urgentes todas las cosas que tenía pendientes por falta de tiempo.
Siguen pendientes, problemas de mi yo de mañana.
Ir a la playa sola, es tan satisfactorio y relajante como pensaba. Pero menos placentero que... contigo. Y necesito ayuda para darme crema en la espalda.
A los cuarenta, en bikini, todavía te miran los de ventimuchos, pero si se te acerca alguno preguntando si estás sola...te acuerdas de la Sra. Robinson. Y da coraje.
Puede ser divertido cocinar. Bueno, lo dejamos en entretenido y manipular alimentos...
Los baños de espuma pueden ser laaaargos, y hasta silenciosos. O puedes acompañarlo de musica suave para recordar a alguien...pero eso predispone al amor propio.
Las películas de miedo se llaman así por algo...
No te hace falta todo el sofá para estar comodo.
Comer sola es triste. Dormir sola es extraño. Y lastimoso. Y tambien predispone. Y te dan ganas de mandar mensajes.
Puedo emocionarme escuchando las Mentiras Negras de Moncho. Y Me muero, me muero...Eso pasa por hacer zapping.
Y el mando no encuentra un programa interesante, aunque lo manejes tú.
Pensar en tí nunca es suficiente, así que voy a dormir, para soñarte un rato.
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