Eso me pasa por meterme a torera...Suelo ser de natural entusiasta, y si se me ocurre algo en un día subidita de ánimo (véase viernes libre), no suele darme miedo. Todo es fácil. Y luego me llevo el palo...
Hoy ha tocado un tema tan aparentemente sencillo como la jardinería. Todo el mundo que tiene medio kilo de tierra, cultiva plantas, macetas, y rara es la casa andaluza que no presuma de alguna.
Desde que tengo un cachito de arriate, le vengo dando vueltas. Primero pensé en un jardín zen, por aquello de las modernuras...pero no tengo tanto equilibrio, y me parecen sosos. Ignorancia, supongo. Mejor algo tradicional, sin caer en el patio cordobés (con todos mis respetos), ni claveles, ni geranios...
Tenía que ser algo discreto, fácil de mantener y cultivar, que necesite poco tiempo y que dé flores. Las plantas sin flores no me gustan. La primera elección fueron rosas, mis favoritas. No se me ha dado mal. Llevan vivas más de cuatro meses y cumplen expectativas.
Pero necesitan algo que las acompañe, que cubra la desnudez de la tierra. Pura estética. Buscaba una planta bajita, con flores, y resistente. Me dirigí a mi vivero de cabecera y, sin dudarlo, uno de los jardineros me señaló las petunias, dejando caer que aguantan al sol, florecen todo el año y recalcando que son fáciles de cultivar. Supongo que no iba yo vestida de jardinera, y el avispado joven se dio cuenta de mi sobrada experiencia, por los tecnicismos usados para pedirle consejo: "necesito una planta bajita, que dé flores, para ponerla entre los rosales".
Me dirigí entusiasmada a la parcela inmensa de petunias, que resultaron ser unas flores atrompetadas, de muchísimos colores, y de oferta. Recordé haberlas visto en montones de jardines públicos de Sevilla, en parterres a pleno sol, así que, como decía el artista, deben ser resistentes. A prueba de ineptas. Ni corta ni perezosa, empecé a llenar el carro de tiestos de petunias. Si, el carro lleno. Por aquello del día entusiasta...Ya me informaré de los cuidados cuando llegue a casa, pensé para mis adentros.
Pues ahí las tengo, amontonadas en el patio para trasplantarlas mañana al que, probablemente, sea su lecho de muerte.
Resulta que me he informado, y necesitan plantarse en terreno mitad tierra mitad compost, con perlita o arena para facilitar la dispersión de semillas, con suficiente fondo para que drenen, sin que lleguen a rozar el suelo, porque se pudre, con un índice medio de nitratos mixtos, que debe ser regulado en el agua de riego cada quince días cuando florece, y cada mes el resto del tiempo, en lugar soleado pero evitando las horas centrales del día (si le da el sol en estas horas debe estar protegida por arbustos), se debe regar por goteo o en la base, pero nunca sobre las flores...Puede ser grandiflora, multiflora hedgiflora o milliflora, cada una con sus especificaciones...
Supongo que si llego a seguir leyendo me explicaría sobre qué temas puedo hablarles, la música que las predispone, y el color de la regadera...
¿Cómo puede ser tan complicado cultivar una planta fácil? ¿Que hay que hacer, entonces, con las orquídeas, los nardos y los gladiolos? Como consiguen las sandías cuadradas sin pipas??!! Si yo no tengo claro de un mes para otro cuando me toca la regla, ¿como voy a estar pendiente del riego con nitratos? ¿Y donde se compran? ¿Nitraterías? ¿Voy al vivero y pido cuarto y mitad de nitratos?
Ahora se me antoja que los tiestos de petunias en el vivero, eran como los niños de los orfanatos de películas antiguas, esperando que alguien se los lleve, sin saber qué futuro les espera... Las pobres que yo he comprado, van a ser abandonadas a su suerte en un lecho de tierra de la sierra norte y estiércol de oveja común, colocadas entre un rosal y otro, a la buena de dios, y regadas por mis niños la mayoría de las veces. El sol, el agua y los nitratos que reciba cada una, serán un misterio. Alea jacta est.
Al jardinero de cabecera tendré que preguntarle sobre su concepto de cultivo fácil....
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