Me refiero a la Eurocrisis. Parece que el índice de criminalidad, las catástrofes medioambientales y los nacimientos de niños famosos, que antes disfrutábamos en los noticieros, han dejado de suceder. Ya solo hay Eurocrisis o asuntos relacionados.
Y desde una perspectiva artificiosamente frívola, es comparable al supuesto experimento sociológico que justificaba el engendro de Gran Hermano. Con todos mis respetos a sus seguidores, que cosas más raras me gustan a mí...
Si se fijan, Europa es la casa. Los países somos los concursantes, sometidos a una serie de pruebas y de exámenes, condenados a convivir aunque nos caiga mal el otro, cuchicheamos y nos aliamos según convenga...y nos nominamos. Ya han nominado a Irlanda, Portugal y Grecia, y andamos en puertas Italia y España. Esta semana, puede que haya expulsión, y la primera en abandonar la casa, si no acabamos antes con el programa, tiene pinta de ser Grecia. A ver si hay suerte y después la contratan otras televisiones, o hace desnudos en revistas, y se forran, que falta les hace.
¿Y quien dirige el programa? ¿Quien se inventa las normas y maneja los hilos a su antojo, para llevar al límite a los concursantes y ganar audiencia (léase forrarse...)? Las Agencias de Valoración y los Mercados. Se están forrando, muertos de risa, subiendo y bajando valoraciones de deuda, engordando primas de riesgo y llenando y vaciando Bolsas. Como los directivos de la tele, a costa de los telespectadores y concursantes.
Lástima que no jueguen con personas que se presentan a un casting, sabiendo a lo que van, sino con el futuro de países, o sea, de gente, de vidas de personas. Personas que ven impotentes que las reglas del juego les restringen los alimentos y los artículos de primera necesidad, pero de verdad. 
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